Convivir con un alcohólico es un desafío que tienes que aprender a gestionar. Si vives con una pareja alcohólica, probablemente has enfrentado muchos retos y experimentado emociones contradictorias. En este momento, puede que estés agotado por tener que asumir más responsabilidades, aterrado por la salud y el futuro de todos en tu hogar, así como triste y enfadado por la situación a la que el alcoholismo de tu pareja te ha llevado.
Lidiar con una pareja alcohólica y afrontar sus comportamientos y tendencias puede tener un gran impacto en la vida de una persona. En este artículo veremos “qué hacer” y “no hacer” al vivir con una persona adicta al alcohol. También hemos recopilado consejos sobre cómo hablar con las personas acerca de su alcoholismo. Pequeños trucos que te serán de utilidad cuando estés listo para tener esta conversación.
Lo que debes hacer al convivir con un alcohólico
Tanto si vives con un alcohólico funcional o con alguien con una dependencia del alcohol, la convivencia puede ser física y emocionalmente agotadora. Aprender a lidiar con un cónyuge alcohólico y cuidar de ti mismo es estresante. Por tanto, es probable que necesites apoyo para aprender a gestionarlo. Aquí te dejamos algunas recomendaciones sobre cómo cuidarte a ti mismo y a las otras personas que viven en tu hogar:
Mantén un nivel de normalidad: Intenta mantener un nivel de normalidad a lo largo de tus días. Sigue una rutina familiar: ve al trabajo, come, relájate y acuéstate a la misma hora todos los días.
Céntrate en ti y en los otros miembros no alcohólicos de tu hogar: Enfócate en ti mismo y en las otras personas de tu hogar que se vean afectadas por tu pareja alcohólica. Esto debe ser tu prioridad, así que concéntrate en la salud física y mental de todos.
Aprene a retirarte Entendemos que esto es realmente difícil de hacer, pero si intentas intervenir y salvar a la persona cada vez que hay un incidente o problema, es probable que su adicción al alcohol continúe. A menudo, los adictos necesitan una crisis para reconocer que deben cambiar.
Busca apoyo externo: Es importante tener un grupo de personas de confianza que puedan escucharte y apoyarte. Además de hablar con amigos cercanos y familiares, piensa en unirte a grupos de ayuda donde puedes hablar con personas que han tenido experiencias similares con familiares. Adicionalmente, es recomendable acudir a terapia para obtener el nivel de apoyo adecuado que necesitas y poder mantenerte bien.
Lo que no debes hacer al convivir con un alcohólico
Rendirte: Recuerda que no estás solo. Hay personas que se preocupan por ti y te apoyarán para que las cosas mejoren. Así que apóyate en ellos y no te rindas.
Enfocarte en detener o controlar el consumo de alcohol de tu pareja. Entendemos que esto puede ser difícil, ya que te importa la persona y vuestra historia en común pesa. Pero recuerda que el pasado no cambia el daño que te hace ni previene el daño que te hará. Pero recuerda, si el alcoholismo le impide controlar su consumo, es muy poco probable que tú puedas cambiarlo. Además, la abstinencia de alcohol puede ser extremadamente peligrosa e incluso mortal, por lo que si la persona decide dejar de beber, debe acceder a apoyo profesional para hacerlo. Anímales a hablar con su médico o contactar con un centro de tratamiento especializado para discutir los mejores pasos a seguir.
No malgastes tu tiempo y energía cubriendo su enfermedad: Normalmente, los alcohólicos no quieren que otras personas sepan cuánto beben, pero no es tu responsabilidad ayudarles a mantenerlo en secreto.
Aléjate si consideras que tu salud física o mental está en peligro: Llegado a este punto, obtén apoyo profesional inmediato y no intentes manejar la situación por ti mismo.
Tómate un tiempo para ti mismo
Vivir y lidiar con un alcohólico puede tener un serio efecto en tu propia salud y bienestar. Es normal que te preocupes por tu ser querido y su salud, así como por su comportamiento. También es posible que sientas ansiedad por el agotamiento psicológico. Es importante que te tomes un tiempo para ti y te asegures de tener un buen sistema de apoyo a tu alrededor durante estos tiempos difíciles. Asegúrate de tomar un descanso y cuidarte.
Lo que debes hacer al hablar con tu pareja alcohólica sobre su consumo
Hablar con tu pareja alcohólica sobre su consumo puede ser desalentador. Aquí tienes algunos consejos para que puedas abordar la conversación con confianza y asegurar que sea lo más efectiva posible.
- Infórmate sobre la adicción al alcohol: Investiga y obtén una buena comprensión de la adicción al alcohol antes de la conversación. Este conocimiento puede ayudarte a explicar los comportamientos que te preocupan. También puede ayudarte a reconocer cualquier intento de engañarte o socavarte.
- Investiga los tratamientos disponibles: Averigua qué tratamientos existen dentro de tus posibilidades. Para ello, investiga ubicación, tratamientos y ratios de eficacia. De esta manera, si tu pareja decide que es el momento de pensar en obtener ayuda, puedes mostrarle el apoyo profesional que tiene a su disposición.
- Habla cuando esté sobrio: Ten la conversación cuando esté sobrio. Así, es más probable que escuchen lo que tienes que decir.
- Explica el impacto que su consumo tiene en ti y en el resto de personas el hecho de convivir con un alcohólico: Hazles saber el impacto que su consumo de alcohol está teniendo en ti y en otros miembros del hogar. Mantén la conversación centrada en ti en lugar de en ellos. Así comprenderán el impacto emocional que genera su enfermedad. Puedes decir algo como: “Llegaste muy borracho a casa y despertaste a los niños. Estoy realmente preocupado por el impacto que esto tendrá en ellos. ¿Qué podemos hacer al respecto?” O: “No llegaste a casa anoche. Estoy empezando a sentirme muy solo. ¿Qué podemos hacer para abordar esto?”
- Ofrece tu apoyo: Hazles saber que les quieres y estarás ahí para apoyarles en su recuperación. Admitir que tienen un problema y acceder al apoyo puede ser realmente aterrador, así que saber que tienen tu apoyo puede ayudarles a tomar el camino correcto.
Lo que no debes hacer al hablar con tu pareja alcohólica sobre su consumo
No hables cuando esté bajo los efectos del alcohol: No hables con ellos cuando estén borrachos ya que es poco probable que escuchen lo que tienes que decir. La ira y el alcohol a menudo están relacionados, por lo que un alcohólico puede volverse defensivo y violento cuando te enfrentas a él, haciendo la situación aún más complicada.
No grites, juzgues o culpes: Esto puede ser muy difícil debido al dolor que te ha causado, pero es probable que la persona esté lidiando con el miedo y la vergüenza. Abordar la conversación de una manera negativa podría hacer que se aleje aún más en su adicción.
No aceptes que eres la razón de su consumo: Convivir con un alcohólico es convivir con la mentira, el chantaje y la manipulación. Le escucharás decir que reducirá el consumo si le dejas en paz, que le estresas… Incluso te llegará a echar la culpa de su enfermedad. Ten muy claro que no es tu culpa. Que el problema de alcohol existiría independientemente de si estuviera a no contigo.
No te precipites: Evita tener expectativas poco realistas, incluso si promete que va a reducir el consumo o dejar de beber. Entendemos que esto puede ser difícil, ya que quieres que esta parte de tu vida termine. En su lugar, permite que haya un período de reflexión después de la conversación y continúa expresándote abierta y honestamente. Si quieren cambiar, anímales a dar pequeños pasos, como contactar con su médico para discutir sus opciones.
Conclusión
Convivir con un alcohólico puede ser desafiante y agotador, tanto física como emocionalmente. Es fundamental recordar que no estás solo y que hay apoyo disponible para ti y tu familia. Mantén un nivel de normalidad en tu vida diaria y enfócate en tu bienestar y el de otros miembros de tu hogar. No intentes controlar o detener el consumo de tu pareja por tu cuenta, ya que esto puede ser peligroso y poco efectivo. Busca ayuda profesional y apóyate en redes de apoyo. Hablar con tu pareja sobre su consumo de alcohol de manera informada y compasiva puede marcar la diferencia en su camino hacia la recuperación. Prioriza siempre tu seguridad y bienestar emocional.